La escultura de Xoloitzcuintle se encuentra en las orillas de la laguna conocida como Alomoloya, en Puebla, así como también em algunos bajos relieves en el piso del perímetro de este ojo de agua.
Según el arqueólogo Alfonso Caso, el xoloitzcuintle acompaña a las almas a recorrer la laguna como prueba de que atravesaron el inframundo.