
La Central de Estudiantes Universitarios rechazó la adhesión del rector de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Enrique Graue, a la marcha #VibraMéxico porque los intereses de las asociaciones convocantes “son ajenos al espíritu universitario”.
A través de un comunicado de prensa, las agrupaciones y alumnos que integran la Central señalaron que Graue no consultó a la comunidad universitaria sobre la decisión ni cuenta con el consenso de la misma, “por lo que su proceder resulta antidemocrático”.
Recalcaron que “la UNAM no es el rector ni sus autoridades”. E instaron a Graue a “manifestarse por la defensa de la educación pública en México, contra el gasolinazo, las crisis económica y de graves violaciones a los derechos humanos, además de sus repercusiones en la comunidad de la Universidad Nacional”.
Cabe señalar que #VibraMéxico convocó a marchar para rechazar las políticas del presidente estadounidense Donald Trump. Hasta el momento se habían adherido 77 convocantes, entre organizaciones de la sociedad civil, medios de comunicación y universidades privadas.
La movilización partirá el mediodía del domingo del Auditorio Nacional al Ángel de la Independencia. Se espera que a las dos de la tarde arriben a la columna de la independencia, donde los asistentes interpretarán el Himno Nacional.
Sin embargo, el encuentro que tendrá #VibraMéxico con la marcha convocada por la organización México Unido, comandada por Isabel Miranda de Wallace, provocó una serie de críticas en torno al propósito de la movilización. Ya que Wallace declaró que la marcha es para mostrar apoyo al gobierno federal frente a Donald Trump.
Exigen a Graue preocuparse más por la UNAM
La Central de Estudiantes Universitarios exigieron que Graue no puede exigir respeto a Trump, si al interior de la UNAM “se violan los derechos a la libre expresión, de reunión, manifestación pública y tránsito, hostigando a los estudiantes que los ejercen, amenazándolos con sancionarlos, vigilándolos, colocando torniquetes y vallas con la misma justificación del presidente de los Estados Unidos de América, es decir, la inseguridad y el miedo”.
Asimismo, demandaron que la rectoría universitaria satisfaga las condiciones de beca, transporte gratuito, instalaciones dignas, comedores económicos y acceso a los alumnos rechazados; así como aumento a matrícula y respeto a los derechos laborales de los docentes.
Finalmente, señalaron que “la mejor defensa de la nación es preservar el carácter público y gratuito de la UNAM, democratizarla, poniendo su investigación, docencia y difusión de la cultura, verdaderamente al servicio del pueblo, sin demagogia ni patrioterismos”.