¿Cómo nos enamoramos? Es una de las preguntas que más revolotean en la cabeza de las personas, pero, ¿dónde inicia esta emoción? ¿Tiene que ver el corazón y las mariposas en el estómago?
De acuerdo con la investigadora emérita del Instituto de Fisiología Celular de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Herminia Pasantes, el amor inicia en el cerebro, que es la zona donde surgen las emociones placenteras que dan felicidad y euforia.
Este sentimiento se origina en una zona llamada circuito de recompensa, que se ubica debajo de la corteza cerebral, detalló la especialista en un boletín difundido por la UNAM en 2017.
Cuando la zona de circuito de recompensa se activa, se generan sensaciones de placer, felicidad o cualquier otro sentimiento relacionado con la euforia; así se involucran neurotransmisores como la dopamina y la serotonina.
Todo este proceso es conocido como enamoramiento y comúnmente se confunde con toma de decisiones impensables.
Pero Pasantes aclaró que esto se debe a que el circuito de recompensa está conectado con la corteza cerebral, que es la que permite razonar, por lo que se nubla el raciocinio.
La especialista señaló que este proceso dura entre dos y seis meses, por lo que lo consiguiente tiene que ver con convenciones sociales y la aceptación de la pareja.