Por: Sor Filotea
Llamarte o escribirte, hoy daría igual.
El único fin que persigo es
dibujarme en tu piel.
Sé que entenderías la solicitud perversa de mi voz o letras…
Secuestraría sólo un par de horas de tu vida,
las suficientes para escudriñar tus sábanas y,
tal vez, hurgar tu alma en silencio.
Disculpa el impulso sórdido de mi cuerpo,
la inconsciencia de mi razón por gozar tus caricias,
por abandonarme en tu pasión, en mi deseo.
Sólo es mi adicción por tu desnudez,
la necesidad de mi vientre
por tenerte hoy.