Editorial | Nuevos aires

El aire le sabe diferente, a nuevo, como si de pronto se hubiera renovado y cambiado de olor, de color, de esencia. Él no lo sabe, pero un año ha terminado y otro ha comenzado.

El aire le sabe diferente, a nuevo, como si de pronto se hubiera renovado y cambiado de olor, de color, de esencia. Él no lo sabe, pero un año ha terminado y otro ha comenzado. El 2014 se despidió y el plumífero casi no lo sintió. Para él, su vuelo acaba de iniciar, siempre consciente de utilizar las corrientes informativas para planear entre la gente, motor de sus ojos hoy y siempre.

El 2015 será su año de prueba; la única que tendrá para demostrar una cara distinta en el periodismo. Se encuentra listo para ganarse la confianza de un mexicano ávido de contenidos propios y de calidad. Entiende y advierte las turbulencias que debe atravesar día con día. Las estelas dejadas por titánicas maquinarias que zopilotean en esta época desde tiempo atrás, no lo asustan. Al contrario, lo alientan a crecer y aprovechar cada una de sus plumas.

Hoy el tecolote se atreverá a desafiar los prejuicios. A demostrar que aun con todas las apuestas en su contra y con el desvirtúo de la prensa, es capaz de hacer algo importante, a pesar de lo modesto de su nido y lo corto de sus alas.

Por todo eso, a partir de hoy el tecolote dará lo más preciado que tiene: sus ojos.

Para este mes hablaremos un poco sobre algunas novedades de este año en deportes, cine, música, y claro, no pueden faltar las fotografías y nuestra sección de Ficciones reales nutrida por nuestros colaboradores.
Gracias a nuestros lectores que nos regalan un granito de su tiempo y un cabello de su confianza para mantenernos en el juego durante este año.

Esto es El Tecolote.

Join the Conversation

2 Comments

Leave a comment
Leave a comment

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *