Por Aideé López Rivera
La maestría y la pasión con que Tommy Halferty Trio interpreta su música, fue premiada con la satisfacción de los asistentes. El cierre del Eurojazz 2015 fue un festejo masivo, en el que algunos participaron bailando, otros gritando y dando palmadas y unos cuantos sentados en el pasto con un libro en la mano.
Este es un año más en el que México recibió a jazzistas europeos con propuestas exitosas por su originalidad. Los 10 días de conciertos fueron grandes oportunidades para que el público pudiera interactuar con artistas extranjeros que, de no ser por este festival, sería difícil encontrar.
El 22 de marzo, la guitarra de Tommy Halferty, el bajo de David Redmon y la batería de Kevin Brady llenaron de ritmo el área verde del Centro Nacional de las Artes (Cenart) con sus melodías de jazz, con influencias de rock.
Algunas gotas de lluvia, en la parte final del concierto, no impidieron que la mayoría de los asistentes se quedaran a disfrutar de la genuina interpretación que la banda hizo de “Everybody’s Party” de John Scofield. Después de esto, la banda irlandesa se despidió, provocando que los asistentes pidieran una pieza más. El deseo fue concedido. Esto fue parte del ambiente:
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