Por: César Soto Morales*
@MtroCesarSotoM
A 14 años de distancia de los atentados del 11 de septiembre a las Torres Gemelas, en Nueva York, sigue pareciendo un pretexto para la invasión de Estados Unidos a Afganistán, la invención del llamado eje del mal y la política intervencionista en Medio Oriente, que ha llevado a dicho país a controlar actualmente la mayor parte de las reservas petroleras del mundo.
Y es que los pretextos siempre han sido utilizados por esta potencia imperialista que con tal de lograr sus objetivos económicos, políticos y militares ha sido capaz de crear las historias más inverosímiles o de aprovechar sucesos que nada tienen que ver, para justificar su injerencia o de plano sus intervenciones militares sobre puntos estratégicos a lo largo y ancho del orbe, para muestra algunos ejemplos:
- El 25 de enero de 1898 el acorazado estadounidense de segunda clase Maine entró en el puerto de La Habana, Cuba, sin haber avisado previamente de su llegada, lo que era contrario a las prácticas diplomáticas y fue calificada como maniobra intimidatoria y de provocación hacia España, quien se mantenía firme en su rechazo a la propuesta de compra realizada por EE.UU. sobre Cuba y Puerto Rico. El 15 de febrero el Maine saltó por los aires. De los 355 tripulantes, murieron 256. El resto sobrevivió ya que a la hora de la explosión gozaba de un baile en su honor en la ciudad. Estudios actuales concluyen que se trató de un estallido interno. Algunos apuntan a una explosión accidental de la santabárbara provocada por el calentamiento de los mamparos que la separaban de la carbonera contigua, que en esos momentos estaba ardiendo. En 1975, el Almirante de los Estados Unidos Hyman G. Rickover, llevó a cabo una extensa investigación que concluyó que “una fuente interna fue la causa de la explosión del Maine”. El caso sirvió de pretexto oficial para la guerra hispano-estadounidense, que llevó a la futura independencia formal de Cuba e hizo que España cediera Filipinas, Puerto Rico y Guam a EE.UU.
- Hace casi medio siglo, para intervenir en la guerra civil de Vietnam, EE.UU. utilizó como justificación un presunto ataque a las naves militares estadounidenses que navegaban en la zona. Pocos años después, en medio del conflicto bélico, un ex funcionario del Pentágono revelaría la falsedad de esta información. Falsedad confirmada oficialmente mucho después, cuando se desclasificaron documentos de la Agencia Nacional de Seguridad.
- A principios de los 1990, una enfermera de un hospital kuwaití afirmaba entre lágrimas que soldados iraquíes habían sacado a 300 recién nacidos de sus incubadoras y los habían dejado morir de frío. La historia fue utilizada como pretexto para intervenir en el conflicto entre Irak y Kuwait, la guerra del Golfo (1990-1991). Más tarde se descubrió que la presunta enfermera era la hija del embajador de Kuwait en EE.UU.
- Según el senador demócrata Carl Levin, el Gobierno del presidente George W. Bush engañó a los estadounidenses en el período previo a la guerra de Irak de 2003, pues la CIA no disponía de pruebas claras que vincularan al Gobierno de Saddam Hussein con los actos terroristas del 11 de septiembre de 2001.
- En 2013, las potencias occidentales culparon al Gobierno de Bashar al Assad, en Siria, de emplear armas químicas contra su pueblo. Este pretexto fue calificado por el presidente Barack Obama de “línea roja” y casi abrió las puertas a una intervención estadounidense en el conflicto sirio. Finalmente, el arsenal tóxico de Siria fue destruido gracias a un acuerdo entre Washington y Moscú.
Estos son sólo algunos de los muchos casos que podemos encontrar bien documentados en la historia de las intervenciones norteamericanas. Como podemos, ver la indignación del pueblo estadounidense ha sido bien canalizada por su gobierno, para justificar invasiones, matanzas, intervenciones y un largo etcétera. Ahora debemos preguntarnos ¿Qué repercusiones tuvo para México y América Latina ese atentado del 11 de septiembre del 2001?
*Catedrático de Relaciones Internacionales en la UNAM
Secretario de Cultura de Morena en el Estado de México